El servicio de enfermeras o enfermeros a domicilio permiten que los pacientes reciban la asistencia que necesitan cuando están enfermos, pero no pueden o no desean estar en el hospital para recibir dichos cuidados.
Contratar este perfil profesional, para atender a pacientes como adultos mayores, permite que estos:
- Se sientan más cómodos.
- No corran los riesgos de desplazamientos inadecuados al hospital o clínica.
- Tengan un mejor manejo postoperatorio.
- Reciban cuidados preventivos.
- Reciban un trato individual y personalizado.
En vista de lo beneficioso que resultan los cuidados que ofrecen las enfermeras a domicilio, en esta publicación detallamos aquellas tareas que pueden realizar en casa, de ser contratadas:
1. Cuidado integral
En este caso la enfermera es parte de un grupo multidisciplinario dirigido por un médico, quien indica los cuidados y el tratamiento que debe tener el paciente para su atención domiciliaria.
2. Cuidado parcial
Generalmente, las enfermeras a domicilio se contratan para cuidados parciales, en este caso, se encargan de atender a pacientes que acaban de ser dados de alta tras una operación, pacientes con dolores crónicos o con enfermedades crónicas. Como sucede en el caso anterior, las enfermeras tienen también la guía del médico del paciente; pero suelen contar con ayuda de la familia para la atención del enfermo, además, su atención suele ser por horas; por ejemplo, cuando no hay familiares en casa que puedan encargarse de la persona convaleciente.
Tareas de las enfermeras a domicilio
A continuación, mencionamos cuáles son las obligaciones que puede tener una enfermera a domicilio:
- Enseñar a los familiares del paciente la forma cómo atenderlo.
- Realizar curaciones en el paciente, sobre todo cuando hay heridas con puntos, ya que necesitan ser desinfectadas.
- Cura de úlceras que se forman por presión a causa de la poca movilidad que suele tener el paciente.
- Ayudar con la higiene diaria del paciente.
- Proporciona al paciente los medicamentos que necesite cada día.
- Guiar al paciente para que practique los ejercicios necesarios, recomendados por su médico, para su rehabilitación.
- Cuidado de catéteres y ostomía, de ser el caso.
- Estar atenta a cualquier cambio en la salud del paciente para notificarlo al médico a cargo del caso.
- Alimentar al paciente, ya sea con comida proporcionada por la familia o preparando para él comida especial según su diagnóstico.
- Ayudar a la persona enferma, en sus actividades cotidianas.
Ahora que conoces el papel de una enfermera a domicilio, contrata a personal capacitado, con experiencia y buenas referencias. ¡Podemos ayudarle!