Encontrar a una buena empleada doméstica no es tarea sencilla, pues debe reunir requisitos que no solo tienen que ver con sus aptitudes, sino que además las competencias personales tienen mucho valor. Recordemos que pasará mucho tiempo en nuestro hogar compartiendo con nuestros seres queridos.
Qué debo tener en cuenta para elegir a una empleada del hogar
Antes que nada, debemos definir qué tareas se le van a asignar a la empleada doméstica, cuál es el presupuesto estimado, si la condición será “cama adentro” o “cama afuera”, cuál será el horario y hasta dónde llegarán las obligaciones de ambas partes.
Pide referencias comprobadas
La primera aproximación para conocer a nuestra posible empleada del hogar es la entrevista personal, pero también es importante indagar sobre sus anteriores trabajos. Una buena forma de confirmar esta información es buscar asistenta doméstica a través de una agencia de empleos, pues allí se han dado a la tarea de filtrar a las mejores candidatas según sus referencias, experiencia y necesidades del cliente.
Una buena empleada del hogar transmite confianza
No se trata de que la candidata a trabajar en nuestro hogar sea extremadamente simpática y conversadora, pero sí debe transmitir confianza en sí misma y proyectar seguridad, pues la empleada del hogar nos apoyará en las labores del hogar y queremos contar con que las haga bien.
Es conciliadora y tiene buen carácter
Si bien una empleada del hogar no va a hacer vida social, sino a trabajar, va a pasar mucho tiempo en nuestro hogar y la convivencia es esencial. Antes que nada se deben tener las reglas claras y buscar siempre elementos que estimulen la buena comunicación, pues muchas veces ella será mediadora de los conflictos familiares por su misma condición de ser un elemento externo.
Una buena empleada doméstica es observadora y proactiva
Este punto es importante, pues no se trata de exigir a la empleada del hogar que haga mucho más de lo que se le ha asignado, pero sí que tenga iniciativa o que al menos comunique situaciones que pudieran mejorarse, para así procurar las soluciones que correspondan. Recordemos que muchas veces la empleada doméstica está más en casa y conoce mejor ciertos detalles que nosotros mismos.
Como has podido observar, seleccionar empleada del hogar es una labor que se debe hacer desde el sentido común, pues será mucho el tiempo que convivirá en casa. Se trata de un tema bastante delicado que debe dejarse en manos de agencias de empleo calificadas, pues son quienes tienen la experiencia, disposición y recursos para presentarnos a la candidata que mejor se adapte a nuestras necesidades.